Muhammad es el Mensajero de Al-lah, y quienes lo siguen son severos con quienes rechazan la verdad..

Muhammad es el Mensajero de Al-lah, y quienes lo siguen son severos con quienes rechazan la verdad y compasivos entre ellos. Los ves inclinarse y postrarse (adorando a su Señor) en busca del favor y la complacencia de Al-lah. Sus rostros están marcados por la huella de la postración. Así es como la Torá los describe. Y el Evangelio los compara con una planta que echa brotes y va fortaleciéndose y aumentando de grosor hasta que se yergue firme sobre el tallo[1]para la admiración de los sembradores y para la exasperación de quienes niegan la fe. Y Al-lah ha prometido a quienes de entre ellos creen y actúan con rectitud Su perdón y una enorme recompensa.