¡Cristianos!, no exageréis en vuestra religión ni digáis sobre Al-lah salvo la verdad.

¡Cristianos!, no exageréis en vuestra religión ni digáis sobre Al-lah salvo la verdad. El Mesías Jesús, hijo de María, no es sino un mensajero de Al-lah a quien creó a partir de la palabra «sé» transmitida a María (a través del ángel Gabriel) y un soplo de vida creado por Él. Creed, pues en Al-lah y en todos Sus mensajeros. Y no digáis que Al-lah es parte de la trinidad; es mejor para vosotros que abandonéis tal idea. Al-lah es un Dios Único, ¡alabado sea! Está muy por encima de tener un hijo. Suyo es todo cuanto existe en los cielos y en la tierra; y Al-lah basta para ocuparse de todos los asuntos de Su creación.