يَـٰٓأَيُّهَا ٱلَّذِينَ ءَامَنُواْ كُلُواْ مِن طَيِّبَٰتِ مَا رَزَقۡنَٰكُمۡ وَٱشۡكُرُواْ لِلَّهِ إِن كُنتُمۡ إِيَّاهُ تَعۡبُدُونَ
¡Oh, creyentes!, comed de las cosas buenas que os hemos concedido y sed agradecidos con Al-lah, si en verdad lo adoráis (solo a Él).
إِنَّمَا حَرَّمَ عَلَيۡكُمُ ٱلۡمَيۡتَةَ وَٱلدَّمَ وَلَحۡمَ ٱلۡخِنزِيرِ وَمَآ أُهِلَّ بِهِۦ لِغَيۡرِ ٱللَّهِۖ فَمَنِ ٱضۡطُرَّ غَيۡرَ بَاغٖ وَلَا عَادٖ فَلَآ إِثۡمَ عَلَيۡهِۚ إِنَّ ٱللَّهَ غَفُورٞ رَّحِيمٌ
Ciertamente, (Al-lah) os ha prohibido la carne del animal hallado muerto, la sangre, la carne de cerdo y la carne del animal que haya sido sacrificado en nombre de otro que no sea Al-lah. Mas quien se vea obligado a ingerirlos por necesidad extrema, sin la intención de desobedecer ni de traspasar los límites, no comete ningún pecado. En verdad, Al-lah es Indulgente y Misericordioso.
إِنَّ ٱلَّذِينَ يَكۡتُمُونَ مَآ أَنزَلَ ٱللَّهُ مِنَ ٱلۡكِتَٰبِ وَيَشۡتَرُونَ بِهِۦ ثَمَنٗا قَلِيلًا أُوْلَـٰٓئِكَ مَا يَأۡكُلُونَ فِي بُطُونِهِمۡ إِلَّا ٱلنَّارَ وَلَا يُكَلِّمُهُمُ ٱللَّهُ يَوۡمَ ٱلۡقِيَٰمَةِ وَلَا يُزَكِّيهِمۡ وَلَهُمۡ عَذَابٌ أَلِيمٌ
En verdad, quienes ocultan lo que Al-lah ha revelado en las Escrituras (como la descripción del profeta Muhammad) para obtener un mísero beneficio mundanal, esos no ingerirán sino fuego (el cual arderá) en sus entrañas. Y Al-lah no les dirigirá la palabra el Día de la Resurrección ni los purificará (de sus pecados), y sufrirán un castigo doloroso.
أُوْلَـٰٓئِكَ ٱلَّذِينَ ٱشۡتَرَوُاْ ٱلضَّلَٰلَةَ بِٱلۡهُدَىٰ وَٱلۡعَذَابَ بِٱلۡمَغۡفِرَةِۚ فَمَآ أَصۡبَرَهُمۡ عَلَى ٱلنَّارِ
Esos son quienes han preferido el extravío al buen camino, y el castigo al perdón. (¿Cómo se han atrevido a cometer lo que les conducirá al fuego?) ¡A ver cómo van a soportar el fuego infernal!
ذَٰلِكَ بِأَنَّ ٱللَّهَ نَزَّلَ ٱلۡكِتَٰبَ بِٱلۡحَقِّۗ وَإِنَّ ٱلَّذِينَ ٱخۡتَلَفُواْ فِي ٱلۡكِتَٰبِ لَفِي شِقَاقِۭ بَعِيدٖ
Y esto ocurrirá porque Al-lah ha revelado el Libro (el Corán) con la verdad (y ellos lo han rechazado). Y quienes se oponen al Libro se hallan lejos de la verdad en su discrepancia.
۞لَّيۡسَ ٱلۡبِرَّ أَن تُوَلُّواْ وُجُوهَكُمۡ قِبَلَ ٱلۡمَشۡرِقِ وَٱلۡمَغۡرِبِ وَلَٰكِنَّ ٱلۡبِرَّ مَنۡ ءَامَنَ بِٱللَّهِ وَٱلۡيَوۡمِ ٱلۡأٓخِرِ وَٱلۡمَلَـٰٓئِكَةِ وَٱلۡكِتَٰبِ وَٱلنَّبِيِّـۧنَ وَءَاتَى ٱلۡمَالَ عَلَىٰ حُبِّهِۦ ذَوِي ٱلۡقُرۡبَىٰ وَٱلۡيَتَٰمَىٰ وَٱلۡمَسَٰكِينَ وَٱبۡنَ ٱلسَّبِيلِ وَٱلسَّآئِلِينَ وَفِي ٱلرِّقَابِ وَأَقَامَ ٱلصَّلَوٰةَ وَءَاتَى ٱلزَّكَوٰةَ وَٱلۡمُوفُونَ بِعَهۡدِهِمۡ إِذَا عَٰهَدُواْۖ وَٱلصَّـٰبِرِينَ فِي ٱلۡبَأۡسَآءِ وَٱلضَّرَّآءِ وَحِينَ ٱلۡبَأۡسِۗ أُوْلَـٰٓئِكَ ٱلَّذِينَ صَدَقُواْۖ وَأُوْلَـٰٓئِكَ هُمُ ٱلۡمُتَّقُونَ
La piedad no consiste solamente en volver el rostro hacia oriente u occidente (para realizar el salat), sino que consiste en creer en Al-lah, en el Día de la Resurrección, en los ángeles, en los Libros revelados y en los profetas. Consiste en superar el apego que se siente hacia las riquezas y dar parte de estas a los parientes, a los huérfanos, a los pobres, a los viajeros (que carecen de medios), a los mendigos y a los esclavos que desean comprar su libertad. Consiste en cumplir con el salat, en entregar el azaque, en respetar los pactos tras establecerlos, en tener paciencia ante la pobreza, la enfermedad y los momentos difíciles de lucha. (Quienes cumplen con ello), esos son los veraces, y esos son los piadosos.
يَـٰٓأَيُّهَا ٱلَّذِينَ ءَامَنُواْ كُتِبَ عَلَيۡكُمُ ٱلۡقِصَاصُ فِي ٱلۡقَتۡلَىۖ ٱلۡحُرُّ بِٱلۡحُرِّ وَٱلۡعَبۡدُ بِٱلۡعَبۡدِ وَٱلۡأُنثَىٰ بِٱلۡأُنثَىٰۚ فَمَنۡ عُفِيَ لَهُۥ مِنۡ أَخِيهِ شَيۡءٞ فَٱتِّبَاعُۢ بِٱلۡمَعۡرُوفِ وَأَدَآءٌ إِلَيۡهِ بِإِحۡسَٰنٖۗ ذَٰلِكَ تَخۡفِيفٞ مِّن رَّبِّكُمۡ وَرَحۡمَةٞۗ فَمَنِ ٱعۡتَدَىٰ بَعۡدَ ذَٰلِكَ فَلَهُۥ عَذَابٌ أَلِيمٞ
¡Oh, creyentes!, se os prescribe la ley del talión en caso de asesinato: el hombre libre por el hombre libre, el esclavo por el esclavo, la mujer por la mujer[1]. Mas si el asesino es perdonado por el hermano (o parientes cercanos) de la víctima (a cambio de una compensación económica), que (ambas partes) actúen según lo reconocido y de buena manera (de tal forma que los familiares de la víctima pidan la indemnización sin violencia, y que el asesino la entregue lo antes posible y de manera honrosa). Este perdón junto con la indemnización son un alivio de vuestro Señor y una muestra de Su misericordia[2]. Y quien traspase los límites tras la aplicación de esta ley recibirá un castigo doloroso.
1- Esta ley, también conocida como la ley de igualdad ante el castigo, pretende castigar con la muerte solamente al autor del crimen, sin extender la pena a otro que no sea el culpable. Así pues, el hombre libre que matase a otro hombre libre debía morir, y nadie más en su lugar; el esclavo que matase a un esclavo debía morir, y nadie más en su lugar; y la mujer que matase a otra mujer debía morir, y nadie más en su lugar.
2- A diferencia de los judíos y cristianos, los musulmanes pueden perdonar la vida del asesino y recibir a cambio una compensación económica. Los judíos podían aplicar el talión o perdonar al asesino, pero no podían recibir una indemnización a cambio del perdón; mientras que a los cristianos se los exhortaba a perdonar al asesino, pero su legislación no incluía ninguna compensación económica.
وَلَكُمۡ فِي ٱلۡقِصَاصِ حَيَوٰةٞ يَـٰٓأُوْلِي ٱلۡأَلۡبَٰبِ لَعَلَّكُمۡ تَتَّقُونَ
Y con la aplicación del talión tenéis (una manera de proteger la) vida[1], ¡oh, hombres de buen juicio!, para que podáis adquirir temor de Al-lah (y os abstengáis, así, de matar y de todo lo que Él prohíbe).
1- La aplicación de esta ley garantiza una vida más segura, ya que el asesino sabe que recibirá la pena de muerte si mata a una persona y ello puede hacer que se abstenga de cometer dicho crimen.
كُتِبَ عَلَيۡكُمۡ إِذَا حَضَرَ أَحَدَكُمُ ٱلۡمَوۡتُ إِن تَرَكَ خَيۡرًا ٱلۡوَصِيَّةُ لِلۡوَٰلِدَيۡنِ وَٱلۡأَقۡرَبِينَ بِٱلۡمَعۡرُوفِۖ حَقًّا عَلَى ٱلۡمُتَّقِينَ
Se os ha prescrito que cuando se os presente la muerte y dejéis bienes, el testamento debe ser a favor de vuestros padres y parientes[1], según lo razonable y justo. Este es un deber para los piadosos.
1- Este precepto dejó de aplicarse al ser derogado por las aleyas 11 y 12 de la sura 4, ya que desde la revelación de estas últimas aleyas, a los herederos legítimos (básicamente padres, hijos y cónyuges) les corresponde una parte de herencia que fija la ley islámica, y el testador solo es libre de dejar en testamento la tercera parte de sus bienes, como máximo, a quienes no hereden por ley.
فَمَنۢ بَدَّلَهُۥ بَعۡدَ مَا سَمِعَهُۥ فَإِنَّمَآ إِثۡمُهُۥ عَلَى ٱلَّذِينَ يُبَدِّلُونَهُۥٓۚ إِنَّ ٱللَّهَ سَمِيعٌ عَلِيمٞ
Y quien modifique el testamento después de haberlo escuchado cometerá pecado. En verdad, Al-lah todo lo oye y todo lo sabe.
فَمَنۡ خَافَ مِن مُّوصٖ جَنَفًا أَوۡ إِثۡمٗا فَأَصۡلَحَ بَيۡنَهُمۡ فَلَآ إِثۡمَ عَلَيۡهِۚ إِنَّ ٱللَّهَ غَفُورٞ رَّحِيمٞ
Pero si alguien teme que el testador haya cometido una injusticia y logra un acuerdo entre los herederos, no cometerá ningún pecado. En verdad, Al-lah es Indulgente y Misericordioso.
يَـٰٓأَيُّهَا ٱلَّذِينَ ءَامَنُواْ كُتِبَ عَلَيۡكُمُ ٱلصِّيَامُ كَمَا كُتِبَ عَلَى ٱلَّذِينَ مِن قَبۡلِكُمۡ لَعَلَّكُمۡ تَتَّقُونَ
¡Oh, creyentes!, se os ha prescrito el ayuno[1], al igual que les fue prescrito a quienes os precedieron, para que podáis ser piadosos.
1- El ayuno es uno de los cinco pilares del islam junto con el testimonio de fe en Al-lah y en el profeta Muhammad —que Al-lah lo bendiga y le dé la paz—, el salat, el azaque y el hajj; y también estuvo prescrito anteriormente, aunque puede que no con las mismas condiciones, a otras comunidades.
أَيَّامٗا مَّعۡدُودَٰتٖۚ فَمَن كَانَ مِنكُم مَّرِيضًا أَوۡ عَلَىٰ سَفَرٖ فَعِدَّةٞ مِّنۡ أَيَّامٍ أُخَرَۚ وَعَلَى ٱلَّذِينَ يُطِيقُونَهُۥ فِدۡيَةٞ طَعَامُ مِسۡكِينٖۖ فَمَن تَطَوَّعَ خَيۡرٗا فَهُوَ خَيۡرٞ لَّهُۥۚ وَأَن تَصُومُواْ خَيۡرٞ لَّكُمۡ إِن كُنتُمۡ تَعۡلَمُونَ
(Ayunad) durante unos días determinados (el mes de ramadán). Pero si uno de vosotros está enfermo o de viaje (y no ayuna), deberá compensar esos días ayunándolos más tarde. Y aquellos a quienes el ayuno les suponga una gran dificultad (y no ayunen, como el anciano o el enfermo crónico que no espera restablecerse), tendrán que alimentar a un pobre por día no ayunado como compensación. Y si alguien es generoso de manera voluntaria (en la compensación), será mejor para él; pero ayunar es mejor (que no hacerlo y compensarlo alimentando a los pobres), si supierais.
شَهۡرُ رَمَضَانَ ٱلَّذِيٓ أُنزِلَ فِيهِ ٱلۡقُرۡءَانُ هُدٗى لِّلنَّاسِ وَبَيِّنَٰتٖ مِّنَ ٱلۡهُدَىٰ وَٱلۡفُرۡقَانِۚ فَمَن شَهِدَ مِنكُمُ ٱلشَّهۡرَ فَلۡيَصُمۡهُۖ وَمَن كَانَ مَرِيضًا أَوۡ عَلَىٰ سَفَرٖ فَعِدَّةٞ مِّنۡ أَيَّامٍ أُخَرَۗ يُرِيدُ ٱللَّهُ بِكُمُ ٱلۡيُسۡرَ وَلَا يُرِيدُ بِكُمُ ٱلۡعُسۡرَ وَلِتُكۡمِلُواْ ٱلۡعِدَّةَ وَلِتُكَبِّرُواْ ٱللَّهَ عَلَىٰ مَا هَدَىٰكُمۡ وَلَعَلَّكُمۡ تَشۡكُرُونَ
El mes de ramadán (es el mes) en que descendió el Corán como guía para los hombres con pruebas claras para guiarlos y hacerles discernir entre la verdad y la falsedad. Aquellos de vosotros que presencien el mes (y no estén de viaje) deben ayunarlo; y quien esté enfermo o de viaje (y no ayune) que compense los días no ayunados más tarde. Al-lah quiere hacéroslo fácil y no difícil, pero quiere que completéis los días de ayuno y que (al finalizar el mes de ramadán) proclaméis la grandeza de Al-lah por haberos guiado, y para que podáis ser agradecidos.
وَإِذَا سَأَلَكَ عِبَادِي عَنِّي فَإِنِّي قَرِيبٌۖ أُجِيبُ دَعۡوَةَ ٱلدَّاعِ إِذَا دَعَانِۖ فَلۡيَسۡتَجِيبُواْ لِي وَلۡيُؤۡمِنُواْ بِي لَعَلَّهُمۡ يَرۡشُدُونَ
Y si Mis siervos preguntan por Mí, (diles que) estoy cerca de ellos. Respondo las súplicas de quienes Me invocan. Que Me obedezcan, pues, y que crean en Mí para que puedan estar bien guiados.
أُحِلَّ لَكُمۡ لَيۡلَةَ ٱلصِّيَامِ ٱلرَّفَثُ إِلَىٰ نِسَآئِكُمۡۚ هُنَّ لِبَاسٞ لَّكُمۡ وَأَنتُمۡ لِبَاسٞ لَّهُنَّۗ عَلِمَ ٱللَّهُ أَنَّكُمۡ كُنتُمۡ تَخۡتَانُونَ أَنفُسَكُمۡ فَتَابَ عَلَيۡكُمۡ وَعَفَا عَنكُمۡۖ فَٱلۡـَٰٔنَ بَٰشِرُوهُنَّ وَٱبۡتَغُواْ مَا كَتَبَ ٱللَّهُ لَكُمۡۚ وَكُلُواْ وَٱشۡرَبُواْ حَتَّىٰ يَتَبَيَّنَ لَكُمُ ٱلۡخَيۡطُ ٱلۡأَبۡيَضُ مِنَ ٱلۡخَيۡطِ ٱلۡأَسۡوَدِ مِنَ ٱلۡفَجۡرِۖ ثُمَّ أَتِمُّواْ ٱلصِّيَامَ إِلَى ٱلَّيۡلِۚ وَلَا تُبَٰشِرُوهُنَّ وَأَنتُمۡ عَٰكِفُونَ فِي ٱلۡمَسَٰجِدِۗ تِلۡكَ حُدُودُ ٱللَّهِ فَلَا تَقۡرَبُوهَاۗ كَذَٰلِكَ يُبَيِّنُ ٱللَّهُ ءَايَٰتِهِۦ لِلنَّاسِ لَعَلَّهُمۡ يَتَّقُونَ
Se os permiten las relaciones íntimas con vuestras esposas durante las noches del mes de ayuno. Ellas son un refugio[1] para vosotros y vosotros, un refugio para ellas. Al-lah sabe que os traicionabais a vosotros mismos (porque os uníais a ellas por las noches cuando lo teníais prohibido con anterioridad). Pero Al-lah ha aceptado vuestro arrepentimiento y os ha perdonado. Ahora podéis mantener relaciones íntimas con ellas y buscar lo que Al-lah ha decretado para vosotros[2].Y comed y bebed hasta que el primer destello del alba rompa la noche. Después continuad el ayuno hasta el anochecer. Pero no os unáis a vuestras esposas si estáis retirados en las mezquitas para adorar a Al-lah[3]. Estas son las leyes que Al-lah establece; no las quebrantéis, pues. Así es como Al-lah aclara Sus mandatos a los hombres para que puedan ser piadosos.
1- Literalmente, la aleya dice: «Ellas son una vestimenta para vosotros y vosotros, una vestimenta para ellas». No obstante, el término «vestimenta» —en árabe libas—posee un significado muy amplio, e incluye la protección que los esposos se ofrecen mutuamente en todos los sentidos y la necesidad del uno por el otro, pues la pareja debe ser un refugio donde hallar apoyo y tranquilidad.
2- Puede hacer referencia a la descendencia o bien a lo que ha permitido dentro de las relaciones sexuales.
3- Es muy frecuente retirarse a una mezquita durante los últimos días de ramadán para dedicarlos exclusivamente a adorar a Al-lah, aunque, de hecho, este tipo de retiro voluntario puede realizarse en cualquier momento del año y puede durar los días que se deseen. No obstante, quien lo practica no debe abandonar la mezquita, salvo por una necesidad. Algunos compañeros del Profeta —que Al-lah lo bendiga y le dé la paz— aprovechaban una salida por la noche para mantener relaciones con sus esposas antes de que esta aleya fuera revelada prohibiéndolo.
وَلَا تَأۡكُلُوٓاْ أَمۡوَٰلَكُم بَيۡنَكُم بِٱلۡبَٰطِلِ وَتُدۡلُواْ بِهَآ إِلَى ٱلۡحُكَّامِ لِتَأۡكُلُواْ فَرِيقٗا مِّنۡ أَمۡوَٰلِ ٱلنَّاسِ بِٱلۡإِثۡمِ وَأَنتُمۡ تَعۡلَمُونَ
Y no consumáis injustamente los bienes ajenos ni los uséis para sobornar a los jueces para, así, apropiaros ilegalmente y a sabiendas de algo que no es vuestro.
۞يَسۡـَٔلُونَكَ عَنِ ٱلۡأَهِلَّةِۖ قُلۡ هِيَ مَوَٰقِيتُ لِلنَّاسِ وَٱلۡحَجِّۗ وَلَيۡسَ ٱلۡبِرُّ بِأَن تَأۡتُواْ ٱلۡبُيُوتَ مِن ظُهُورِهَا وَلَٰكِنَّ ٱلۡبِرَّ مَنِ ٱتَّقَىٰۗ وَأۡتُواْ ٱلۡبُيُوتَ مِنۡ أَبۡوَٰبِهَاۚ وَٱتَّقُواْ ٱللَّهَ لَعَلَّكُمۡ تُفۡلِحُونَ
Te preguntan acerca de las lunas crecientes (¡oh, Muhammad!). Diles: «Son señales para que los hombres puedan calcular el tiempo y la fecha de la peregrinación del hajj». Y la piedad no consiste en entrar en las casas por detrás[1], sino que consiste en temer a Al-lah (alejándose de lo que Él prohíbe y obedeciendo Sus mandatos). Entrad, pues, en las casas por sus puertas. Y temed a Al-lah para que podáis triunfar.
1- En la época previa al islam, cuando alguien salía de su casa con la intención de iniciar un viaje y después decidía no viajar, regresaba a su casa escalando el muro de la parte posterior de esta y no entraba por la puerta, pensando que lo que hacía era más piadoso. También se ha relatado que, en general, quienes volvían de un viaje o tras entrar en el estado de consagración (ihram) para realizar la peregrinación del hajj entraban en la casa de la misma manera.
وَقَٰتِلُواْ فِي سَبِيلِ ٱللَّهِ ٱلَّذِينَ يُقَٰتِلُونَكُمۡ وَلَا تَعۡتَدُوٓاْۚ إِنَّ ٱللَّهَ لَا يُحِبُّ ٱلۡمُعۡتَدِينَ
Y luchad por la causa de Al-lah contra los que os combaten, mas no traspaséis los límites[1] (ni seáis los primeros en atacar). En verdad, Al-lah no ama a los transgresores.
1- Los límites a los que hace referencia la aleya son: mutilar a los muertos; robar parte del botín; matar a mujeres, ancianos y niños y a todo aquel que no participa en la batalla; destruir templos y matar a quienes se hallan dentro; derribar árboles y matar animales sin razón alguna.
وَٱقۡتُلُوهُمۡ حَيۡثُ ثَقِفۡتُمُوهُمۡ وَأَخۡرِجُوهُم مِّنۡ حَيۡثُ أَخۡرَجُوكُمۡۚ وَٱلۡفِتۡنَةُ أَشَدُّ مِنَ ٱلۡقَتۡلِۚ وَلَا تُقَٰتِلُوهُمۡ عِندَ ٱلۡمَسۡجِدِ ٱلۡحَرَامِ حَتَّىٰ يُقَٰتِلُوكُمۡ فِيهِۖ فَإِن قَٰتَلُوكُمۡ فَٱقۡتُلُوهُمۡۗ كَذَٰلِكَ جَزَآءُ ٱلۡكَٰفِرِينَ
Y matad (a quienes os atacan a vosotros y a vuestra religión) allí donde los encontréis y expulsadlos de donde os expulsaron (la ciudad de La Meca). La idolatría y el hecho de que os aparten del islam es más grave que matarlos. Mas no luchéis en la Mezquita Sagrada a menos que os ataquen allí; y si os atacan, matadlos. Tal es el castigo de quienes rechazan la verdad.
فَإِنِ ٱنتَهَوۡاْ فَإِنَّ ٱللَّهَ غَفُورٞ رَّحِيمٞ
Pero si cesan (en su incredulidad y dejan de atacaros), en verdad, Al-lah es Indulgente y Misericordioso.
وَقَٰتِلُوهُمۡ حَتَّىٰ لَا تَكُونَ فِتۡنَةٞ وَيَكُونَ ٱلدِّينُ لِلَّهِۖ فَإِنِ ٱنتَهَوۡاْ فَلَا عُدۡوَٰنَ إِلَّا عَلَى ٱلظَّـٰلِمِينَ
Y combatidles hasta que no haya más persecución contra la religión y no se adore más que a Al-lah. Mas si cesan (en su hostigamiento), que no haya hostilidad contra ellos, salvo con los injustos que continúen atacándoos y negando la verdad.
ٱلشَّهۡرُ ٱلۡحَرَامُ بِٱلشَّهۡرِ ٱلۡحَرَامِ وَٱلۡحُرُمَٰتُ قِصَاصٞۚ فَمَنِ ٱعۡتَدَىٰ عَلَيۡكُمۡ فَٱعۡتَدُواْ عَلَيۡهِ بِمِثۡلِ مَا ٱعۡتَدَىٰ عَلَيۡكُمۡۚ وَٱتَّقُواْ ٱللَّهَ وَٱعۡلَمُوٓاْ أَنَّ ٱللَّهَ مَعَ ٱلۡمُتَّقِينَ
El mes sagrado por el mes sagrado[1]; y la violación de todo lo sagrado se somete a una pena similar a la violación cometida. Así pues, si alguien se excede con vosotros, actuad de la misma manera contra él. Mas temed a Al-lah y sabed que Él está con quienes Le temen.
1- Significa que solamente podéis combatir en un mes sagrado si sois atacados en dicho mes, como respuesta a tal acción. Y los meses sagrados son cuatro: dhulqa’dah, dhulhijjah, muharram y rajab, que son los meses número 11, 12, 1 y 7 del calendario islámico.
وَأَنفِقُواْ فِي سَبِيلِ ٱللَّهِ وَلَا تُلۡقُواْ بِأَيۡدِيكُمۡ إِلَى ٱلتَّهۡلُكَةِ وَأَحۡسِنُوٓاْۚ إِنَّ ٱللَّهَ يُحِبُّ ٱلۡمُحۡسِنِينَ
Y contribuid (con vuestros bienes) a la causa de Al-lah y no causéis vuestra propia destrucción (no contribuyendo a ella ni luchando por ella). Y obrad el bien; en verdad, Al-lah ama a los bienhechores.
وَأَتِمُّواْ ٱلۡحَجَّ وَٱلۡعُمۡرَةَ لِلَّهِۚ فَإِنۡ أُحۡصِرۡتُمۡ فَمَا ٱسۡتَيۡسَرَ مِنَ ٱلۡهَدۡيِۖ وَلَا تَحۡلِقُواْ رُءُوسَكُمۡ حَتَّىٰ يَبۡلُغَ ٱلۡهَدۡيُ مَحِلَّهُۥۚ فَمَن كَانَ مِنكُم مَّرِيضًا أَوۡ بِهِۦٓ أَذٗى مِّن رَّأۡسِهِۦ فَفِدۡيَةٞ مِّن صِيَامٍ أَوۡ صَدَقَةٍ أَوۡ نُسُكٖۚ فَإِذَآ أَمِنتُمۡ فَمَن تَمَتَّعَ بِٱلۡعُمۡرَةِ إِلَى ٱلۡحَجِّ فَمَا ٱسۡتَيۡسَرَ مِنَ ٱلۡهَدۡيِۚ فَمَن لَّمۡ يَجِدۡ فَصِيَامُ ثَلَٰثَةِ أَيَّامٖ فِي ٱلۡحَجِّ وَسَبۡعَةٍ إِذَا رَجَعۡتُمۡۗ تِلۡكَ عَشَرَةٞ كَامِلَةٞۗ ذَٰلِكَ لِمَن لَّمۡ يَكُنۡ أَهۡلُهُۥ حَاضِرِي ٱلۡمَسۡجِدِ ٱلۡحَرَامِۚ وَٱتَّقُواْ ٱللَّهَ وَٱعۡلَمُوٓاْ أَنَّ ٱللَّهَ شَدِيدُ ٱلۡعِقَابِ
Y realizad las peregrinaciones del hajj y del ‘umrah sinceramente por Al-lah. Pero si algo os impidiera completarlas (tras haber manifestado vuestra intención de hacerlo), sacrificad el animal que podáis (un camello, una vaca, una cabra o una oveja) como ofrenda. No os afeitéis la cabeza (acción que se lleva a cabo para poner fin al estado de consagración[1] con el que deben realizarse ambas peregrinaciones) hasta que el animal llegue al lugar del sacrificio. Y si uno de vosotros estuviera enfermo o padeciera un problema en el cuero cabelludo (y, por ello, tuviese que rasurarse antes la cabeza), que compense (el haberse afeitado antes de tiempo) con (tres) días de ayuno o bien con comida para (seis) pobres o bien con el sacrificio de un animal (un camello, una vaca, una cabra o una oveja). Y cuando os sintáis seguros y podáis completar los ritos sin temor, aquel que realice la peregrinación del ‘umrah y del hajj (con una interrupción entre ambas peregrinaciones) que sacrifique el animal que pueda (de entre los mencionados anteriormente) como ofrenda; y quien no tenga los medios para hacerlo que ayune tres días durante la peregrinación y siete a su regreso: diez días en total. Esta (combinación de las dos peregrinaciones con la debida ofrenda o el ayuno correspondiente) es para el peregrino que no habita en las proximidades de la Mezquita Sagrada. Temed a Al-lah y sabed que Su castigo es severo.
1- Antes de realizar las peregrinaciones del hajj o del ‘umrah, el peregrino debe entran en el estado de consagración o ihram en uno de los puntos designados para ello (o miqat) cercanos a la ciudad de La Meca. Para entrar en dicho estado se pronuncia en voz alta la intención de realizar la peregrinación y, a partir de dicho momento, el hombre no debe vestir ninguna prenda cosida (por lo que viste dos toallas o dos sábanas que no estén bordadas; mientras que la mujer no debe usar guantes ni cubrirse el rostro con un niqab) y se le prohíben diversas acciones como: cortarse el pelo o las uñas, ponerse perfume, mantener relaciones sexuales, pelearse, cazar, etc. Una vez acabados los ritos, se sale de dicho estado cortándose el pelo o afeitándose la cabeza (esto último solo en el caso del hombre). El incumplimiento de las prohibiciones mencionadas puede invalidar la peregrinación.
ٱلۡحَجُّ أَشۡهُرٞ مَّعۡلُومَٰتٞۚ فَمَن فَرَضَ فِيهِنَّ ٱلۡحَجَّ فَلَا رَفَثَ وَلَا فُسُوقَ وَلَا جِدَالَ فِي ٱلۡحَجِّۗ وَمَا تَفۡعَلُواْ مِنۡ خَيۡرٖ يَعۡلَمۡهُ ٱللَّهُۗ وَتَزَوَّدُواْ فَإِنَّ خَيۡرَ ٱلزَّادِ ٱلتَّقۡوَىٰۖ وَٱتَّقُونِ يَـٰٓأُوْلِي ٱلۡأَلۡبَٰبِ
La peregrinación del hajj debe realizarse en unos meses consabidos[1]. Quien tenga la intención de realizar la peregrinación del hajj (y entre en el estado de consagración previo para efectuarla) deberá abstenerse de mantener relaciones íntimas (con su cónyuge) y deberá evitar todo aquello que pueda conducir a ellas; deberá abstenerse de pecar y de entrar en disputas mientras dure la peregrinación. Y todo bien que hagáis será del conocimiento de Al-lah. Y aprovisionaos para realizarla, aunque la mejor provisión es la piedad y el temor de Al-lah. ¡Y temedme a Mí, hombres de buen juicio!
1- Significa que la entrada en el estado de consagración previo a realizar la peregrinación (o ihram) debe efectuarse durante los meses del hajj, y no antes, que son: el décimo y undécimo mes del calendario lunar, así como los diez primeros días del duodécimo mes.
لَيۡسَ عَلَيۡكُمۡ جُنَاحٌ أَن تَبۡتَغُواْ فَضۡلٗا مِّن رَّبِّكُمۡۚ فَإِذَآ أَفَضۡتُم مِّنۡ عَرَفَٰتٖ فَٱذۡكُرُواْ ٱللَّهَ عِندَ ٱلۡمَشۡعَرِ ٱلۡحَرَامِۖ وَٱذۡكُرُوهُ كَمَا هَدَىٰكُمۡ وَإِن كُنتُم مِّن قَبۡلِهِۦ لَمِنَ ٱلضَّآلِّينَ
No cometéis pecado alguno si buscáis el favor de vuestro Señor (a través de transacciones comerciales durante la peregrinación). Pero cuando dejéis Arafat[1], recordad a Al-lah invocándolo y glorificándolo en Muzdalifah. Y recordadle dándole las gracias por haberos guiado, pues antes estabais extraviados.
1- Arafat es una localidad cercana a La Meca y es el centro de la peregrinación, pues quien no permanezca en ese lugar el día nueve del mes del hajj (el duodécimo del calendario lunar) no la ha realizado. Los musulmanes deben dedicar ese día a alabar a Al-lah y a suplicarle. Tras la puesta del sol, los peregrinos deben abandonar dicho lugar y tienen que dirigirse a Muzdalifa, una localidad cercana a Arafat de gran importancia dentro de los ritos de la peregrinación.
ثُمَّ أَفِيضُواْ مِنۡ حَيۡثُ أَفَاضَ ٱلنَّاسُ وَٱسۡتَغۡفِرُواْ ٱللَّهَۚ إِنَّ ٱللَّهَ غَفُورٞ رَّحِيمٞ
A continuación abandonad el lugar con la multitud y pedid el perdón de Al-lah. En verdad, Él es Indulgente y Misericordioso.
فَإِذَا قَضَيۡتُم مَّنَٰسِكَكُمۡ فَٱذۡكُرُواْ ٱللَّهَ كَذِكۡرِكُمۡ ءَابَآءَكُمۡ أَوۡ أَشَدَّ ذِكۡرٗاۗ فَمِنَ ٱلنَّاسِ مَن يَقُولُ رَبَّنَآ ءَاتِنَا فِي ٱلدُّنۡيَا وَمَا لَهُۥ فِي ٱلۡأٓخِرَةِ مِنۡ خَلَٰقٖ
Y cuando hayáis completado vuestros ritos, recordad a Al-lah ensalzándolo de una manera similar a como recordáis y exaltáis a vuestros antepasados (con orgullo), pero hacedlo aún con más fuerza. Hay gentes que dicen: «¡Señor, concédenos prosperidad en esta vida!», pero esos no recibirán su parte en la otra (porque solo se preocuparon por la vida mundanal y descuidaron la eterna).
وَمِنۡهُم مَّن يَقُولُ رَبَّنَآ ءَاتِنَا فِي ٱلدُّنۡيَا حَسَنَةٗ وَفِي ٱلۡأٓخِرَةِ حَسَنَةٗ وَقِنَا عَذَابَ ٱلنَّارِ
Y hay quienes dicen: «¡Señor, concédenos prosperidad en esta vida y en la otra, y protégenos del castigo del fuego!».