ٱلَّذِينَ قَالَ لَهُمُ ٱلنَّاسُ إِنَّ ٱلنَّاسَ قَدۡ جَمَعُواْ لَكُمۡ فَٱخۡشَوۡهُمۡ فَزَادَهُمۡ إِيمَٰنٗا وَقَالُواْ حَسۡبُنَا ٱللَّهُ وَنِعۡمَ ٱلۡوَكِيلُ
Esos a quienes algunos dijeron (para asustarlos después de regresar de Uhud): “(Los idólatras de La Meca) se han reunido contra ustedes, ¡témanles!”. Mas ello no hizo sino aumentar su fe, y dijeron: “Al-lah nos basta (contra ellos); ¡y qué excelente protector!”.
رَّبَّنَآ إِنَّنَا سَمِعۡنَا مُنَادِيٗا يُنَادِي لِلۡإِيمَٰنِ أَنۡ ءَامِنُواْ بِرَبِّكُمۡ فَـَٔامَنَّاۚ رَبَّنَا فَٱغۡفِرۡ لَنَا ذُنُوبَنَا وَكَفِّرۡ عَنَّا سَيِّـَٔاتِنَا وَتَوَفَّنَا مَعَ ٱلۡأَبۡرَارِ
¡Señor nuestro!, hemos escuchado la llamada de quien invita a la fe (Muhammad) diciendo: ‘Crean en su Señor’, y hemos creído. ¡Señor!, perdona, pues, nuestros pecados, borra nuestras malas acciones y haz que al morir estemos con los piadosos y virtuosos.
وَمَن لَّمۡ يَسۡتَطِعۡ مِنكُمۡ طَوۡلًا أَن يَنكِحَ ٱلۡمُحۡصَنَٰتِ ٱلۡمُؤۡمِنَٰتِ فَمِن مَّا مَلَكَتۡ أَيۡمَٰنُكُم مِّن فَتَيَٰتِكُمُ ٱلۡمُؤۡمِنَٰتِۚ وَٱللَّهُ أَعۡلَمُ بِإِيمَٰنِكُمۚ بَعۡضُكُم مِّنۢ بَعۡضٖۚ فَٱنكِحُوهُنَّ بِإِذۡنِ أَهۡلِهِنَّ وَءَاتُوهُنَّ أُجُورَهُنَّ بِٱلۡمَعۡرُوفِ مُحۡصَنَٰتٍ غَيۡرَ مُسَٰفِحَٰتٖ وَلَا مُتَّخِذَٰتِ أَخۡدَانٖۚ فَإِذَآ أُحۡصِنَّ فَإِنۡ أَتَيۡنَ بِفَٰحِشَةٖ فَعَلَيۡهِنَّ نِصۡفُ مَا عَلَى ٱلۡمُحۡصَنَٰتِ مِنَ ٱلۡعَذَابِۚ ذَٰلِكَ لِمَنۡ خَشِيَ ٱلۡعَنَتَ مِنكُمۡۚ وَأَن تَصۡبِرُواْ خَيۡرٞ لَّكُمۡۗ وَٱللَّهُ غَفُورٞ رَّحِيمٞ
Y aquel de ustedes que no disponga de medios para casarse con mujeres creyentes libres que se case con jóvenes creyentes de entre sus esclavas. Al-lah conoce perfectamente su fe, provienen los unos de los otros (y son iguales ante Al-lah en la religión). Y cásense con el permiso de sus amos y denles su maher como es debido; y que sean decentes, no promiscuas ni de las que toman amantes. Y si después de casarse cometen adulterio, recibirán la mitad del castigo que les corresponde a las mujeres libres. Esto es para aquellos de ustedes que teman caer en la fornicación (si no se casan), pero es mejor para ustedes ser pacientes (hasta que dispongan de los medios para casarse con mujeres libres). Y Al-lah es Indulgente y Misericordioso.
هَلۡ يَنظُرُونَ إِلَّآ أَن تَأۡتِيَهُمُ ٱلۡمَلَـٰٓئِكَةُ أَوۡ يَأۡتِيَ رَبُّكَ أَوۡ يَأۡتِيَ بَعۡضُ ءَايَٰتِ رَبِّكَۗ يَوۡمَ يَأۡتِي بَعۡضُ ءَايَٰتِ رَبِّكَ لَا يَنفَعُ نَفۡسًا إِيمَٰنُهَا لَمۡ تَكُنۡ ءَامَنَتۡ مِن قَبۡلُ أَوۡ كَسَبَتۡ فِيٓ إِيمَٰنِهَا خَيۡرٗاۗ قُلِ ٱنتَظِرُوٓاْ إِنَّا مُنتَظِرُونَ
¿Acaso esperan a que lleguen los ángeles (para tomar sus almas) o a que llegue tu Señor (¡oh, Muhammad!, para juzgarlos el Día de la Resurrección), o esperan recibir algunas señales [1] de tu Señor (acerca de la llegada de la Hora final, cuando todo lo que existe en la tierra perecerá)? Cuando lleguen tales señales, de nada servirá creer si no se había creído con anterioridad ni se habían realizado buenas acciones desde la fe (y de nada servirá arrepentirse entonces). Diles: “¡Esperen (a que les llegue una de esas tres cosas para ver lo que les sucede), nosotros también esperamos!”.
1- Las señales mayores que marcan la proximidad de la llegada de la Hora final son varias, como la venida del Falso Mesías (Al Masih Ad-Dayyal), el regreso de Jesús —la paz de Al-lah esté con él—, la aparición de Gog y Magog y los deslizamientos de tierra. No obstante, habrá otras señales que indicarán que el fin de esta creación ya estará ocurriendo y, por lo tanto, ya no habrá posibilidad de arrepentimiento; estas señales son: la aparición de la bestia que hablará a los hombres, el humo que envolverá a los creyentes y a los incrédulos y que afectará severamente a estos últimos, y la salida del sol por occidente.
إِنَّمَا ٱلۡمُؤۡمِنُونَ ٱلَّذِينَ إِذَا ذُكِرَ ٱللَّهُ وَجِلَتۡ قُلُوبُهُمۡ وَإِذَا تُلِيَتۡ عَلَيۡهِمۡ ءَايَٰتُهُۥ زَادَتۡهُمۡ إِيمَٰنٗا وَعَلَىٰ رَبِّهِمۡ يَتَوَكَّلُونَ
Ciertamente, los (verdaderos) creyentes son esos cuyos corazones se estremecen por temor a Al-lah cuando Este es mencionado y, cuando se les recitan Sus aleyas, aumenta su fe, y depositan su confianza en su Señor;
وَإِذَا مَآ أُنزِلَتۡ سُورَةٞ فَمِنۡهُم مَّن يَقُولُ أَيُّكُمۡ زَادَتۡهُ هَٰذِهِۦٓ إِيمَٰنٗاۚ فَأَمَّا ٱلَّذِينَ ءَامَنُواْ فَزَادَتۡهُمۡ إِيمَٰنٗا وَهُمۡ يَسۡتَبۡشِرُونَ
Y cada vez que una sura del Corán es revelada, hay un grupo (de hipócritas) que se dicen entre sí (burlándose): “¿A quién le ha aumentado la fe?”. Los creyentes ven su fe aumentada [1] y se regocijan en ello.
1- Esta aleya es una prueba de que la fe puede aumentar y disminuir mediante los actos de obediencia o desobediencia a Al-lah.
إِنَّ ٱلَّذِينَ ءَامَنُواْ وَعَمِلُواْ ٱلصَّـٰلِحَٰتِ يَهۡدِيهِمۡ رَبُّهُم بِإِيمَٰنِهِمۡۖ تَجۡرِي مِن تَحۡتِهِمُ ٱلۡأَنۡهَٰرُ فِي جَنَّـٰتِ ٱلنَّعِيمِ
Ciertamente, a quienes crean y obren rectamente, Al-lah los guiará a través[1] de su fe (hacia el Paraíso), en cuyos jardines de las delicias corren ríos.
1- La fe de los creyentes se convertirá en luz el Día de la Resurrección y los guiará hacia la entrada del Paraíso. También puede interpretarse que Al-lah los guiará por el camino recto que conduce al Paraíso debido a su fe.
فَلَوۡلَا كَانَتۡ قَرۡيَةٌ ءَامَنَتۡ فَنَفَعَهَآ إِيمَٰنُهَآ إِلَّا قَوۡمَ يُونُسَ لَمَّآ ءَامَنُواْ كَشَفۡنَا عَنۡهُمۡ عَذَابَ ٱلۡخِزۡيِ فِي ٱلۡحَيَوٰةِ ٱلدُّنۡيَا وَمَتَّعۡنَٰهُمۡ إِلَىٰ حِينٖ
No hubo ningún pueblo que creyera y se beneficiara de su fe (cuando el castigo por haber desmentido a su Mensajero era ya inminente), salvo el de Jonás [1]. Cuando creyeron, los libramos de un castigo humillante en esta vida y les permitimos disfrutar durante un tiempo.
1- El Profeta Jonás —la paz de Al-lah esté con él— fue enviado a la ciudad de Nínive. Cuando su gente lo desmintió, él se alejó de ellos. Entonces, su pueblo vio que el castigo de Al-lah iba a abatirse sobre ellos y rogaron perdón a Al-lah durante cuarenta noches. Al-lah aceptó su arrepentimiento y alejó de ellos Su castigo (ver las aleyas 139-148 de la sura 37 para obtener más detalles sobre la historia de Jonás —la paz de Al-lah esté con él—).
مَن كَفَرَ بِٱللَّهِ مِنۢ بَعۡدِ إِيمَٰنِهِۦٓ إِلَّا مَنۡ أُكۡرِهَ وَقَلۡبُهُۥ مُطۡمَئِنُّۢ بِٱلۡإِيمَٰنِ وَلَٰكِن مَّن شَرَحَ بِٱلۡكُفۡرِ صَدۡرٗا فَعَلَيۡهِمۡ غَضَبٞ مِّنَ ٱللَّهِ وَلَهُمۡ عَذَابٌ عَظِيمٞ
Quienes nieguen a Al-lah después de haber creído —excepto quienes se vean obligados a hacerlo mientras que sus corazones permanecen firmes en la fe— y rechacen (voluntariamente y) de corazón la verdad incurrirán en la ira de Al-lah y recibirán un terrible castigo.
وَلَمَّا رَءَا ٱلۡمُؤۡمِنُونَ ٱلۡأَحۡزَابَ قَالُواْ هَٰذَا مَا وَعَدَنَا ٱللَّهُ وَرَسُولُهُۥ وَصَدَقَ ٱللَّهُ وَرَسُولُهُۥۚ وَمَا زَادَهُمۡ إِلَّآ إِيمَٰنٗا وَتَسۡلِيمٗا
Y cuando los creyentes vieron a las tribus aliadas (contra ellos), dijeron: “Esto es lo que Al-lah y Su Mensajero nos habían prometido[1]”. Y no hizo sino aumentar su fe y su sometimiento (a Al-lah).
1- La aleya alude a lo que Al-lah les había asegurado anteriormente en la aleya 214 de la sura 2 acerca de que no entrarían en el Paraíso sin que Al-lah hubiese puesto a prueba su fe, tal y como hizo con los creyentes que los precedieron.
وَكَذَٰلِكَ أَوۡحَيۡنَآ إِلَيۡكَ رُوحٗا مِّنۡ أَمۡرِنَاۚ مَا كُنتَ تَدۡرِي مَا ٱلۡكِتَٰبُ وَلَا ٱلۡإِيمَٰنُ وَلَٰكِن جَعَلۡنَٰهُ نُورٗا نَّهۡدِي بِهِۦ مَن نَّشَآءُ مِنۡ عِبَادِنَاۚ وَإِنَّكَ لَتَهۡدِيٓ إِلَىٰ صِرَٰطٖ مُّسۡتَقِيمٖ
Y del mismo modo (que concedimos Nuestra revelación a profetas anteriores a ti, ¡oh, Muhammad!) te hemos revelado un Corán que vivifica los corazones y las almas. No tenías conocimiento (de los preceptos) de las Escrituras (anteriores) ni (de los detalles) de la fe[1]; mas hemos hecho del Corán una luz con la que guiamos a quien queremos de entre Nuestros siervos. Y tú (¡oh, Muhammad!) guías realmente (a los hombres) hacia el camino recto,
1- Algunos exégetas opinan que la fe significa, en este caso, el salat.
وَٱعۡلَمُوٓاْ أَنَّ فِيكُمۡ رَسُولَ ٱللَّهِۚ لَوۡ يُطِيعُكُمۡ فِي كَثِيرٖ مِّنَ ٱلۡأَمۡرِ لَعَنِتُّمۡ وَلَٰكِنَّ ٱللَّهَ حَبَّبَ إِلَيۡكُمُ ٱلۡإِيمَٰنَ وَزَيَّنَهُۥ فِي قُلُوبِكُمۡ وَكَرَّهَ إِلَيۡكُمُ ٱلۡكُفۡرَ وَٱلۡفُسُوقَ وَٱلۡعِصۡيَانَۚ أُوْلَـٰٓئِكَ هُمُ ٱلرَّـٰشِدُونَ
Y sepan que entre ustedes se encuentra el Mensajero de Al-lah. Si les hiciera caso en muchos asuntos (siguiendo sus deseos), estarían en dificultades; pero Al-lah ha infundido en sus corazones el amor por la fe y la ha embellecido, y ha hecho que detesten la incredulidad, la maldad y la desobediencia. ¡Esos son quienes están bien guiados!
۞قَالَتِ ٱلۡأَعۡرَابُ ءَامَنَّاۖ قُل لَّمۡ تُؤۡمِنُواْ وَلَٰكِن قُولُوٓاْ أَسۡلَمۡنَا وَلَمَّا يَدۡخُلِ ٱلۡإِيمَٰنُ فِي قُلُوبِكُمۡۖ وَإِن تُطِيعُواْ ٱللَّهَ وَرَسُولَهُۥ لَا يَلِتۡكُم مِّنۡ أَعۡمَٰلِكُمۡ شَيۡـًٔاۚ إِنَّ ٱللَّهَ غَفُورٞ رَّحِيمٌ
(Algunos) beduinos dicen: “Creemos”. Diles (¡oh, Muhammad!): “Todavía no son verdaderos creyentes pues la fe no ha arraigado aún en sus corazones, más bien digan que han aceptado el Islam[1]. Y si obedecen a Al-lah y a Su Mensajero, Él no dejará ninguna de sus (buenas) acciones sin recompensa. En verdad, Al-lah es Indulgente y Misericordioso”.
1- A pesar de que ambos términos —fe (iman) e Islam— se suelen utilizar como sinónimos, no lo son cuando son mencionados juntos, ya que entonces cada uno posee un significado específico: el iman implica tener fe en el corazón y creer con convicción, lo que supone un grado más elevado que el Islam, que podría definirse como someterse a Al-lah a través de los actos. Así pues, el primer paso sería someterse a Al-lah siguiendo Sus órdenes y Sus prohibiciones, mientras que el arraigo de la fe (iman) en el corazón necesita más tiempo y va creciendo y aumentando mediante la obediencia a Al-lah.
إِنَّمَا ٱلۡمُؤۡمِنُونَ ٱلَّذِينَ ءَامَنُواْ بِٱللَّهِ وَرَسُولِهِۦ ثُمَّ لَمۡ يَرۡتَابُواْ وَجَٰهَدُواْ بِأَمۡوَٰلِهِمۡ وَأَنفُسِهِمۡ فِي سَبِيلِ ٱللَّهِۚ أُوْلَـٰٓئِكَ هُمُ ٱلصَّـٰدِقُونَ
Los verdaderos creyentes son quienes creen en Al-lah y en Su Mensajero, se reafirman en su fe y no dudan, y luchan con sus bienes y sus vidas por la causa de Al-lah. Esos son realmente los sinceros de corazón.
قُلۡ أَتُعَلِّمُونَ ٱللَّهَ بِدِينِكُمۡ وَٱللَّهُ يَعۡلَمُ مَا فِي ٱلسَّمَٰوَٰتِ وَمَا فِي ٱلۡأَرۡضِۚ وَٱللَّهُ بِكُلِّ شَيۡءٍ عَلِيمٞ
Diles (a dichos beduinos): “¿Pretenden informar a Al-lah de la fe que hay en sus corazones cuando Él conoce cuanto hay en los cielos y en la tierra? Al-lah tiene conocimiento sobre todas las cosas”.
يَمُنُّونَ عَلَيۡكَ أَنۡ أَسۡلَمُواْۖ قُل لَّا تَمُنُّواْ عَلَيَّ إِسۡلَٰمَكُمۖ بَلِ ٱللَّهُ يَمُنُّ عَلَيۡكُمۡ أَنۡ هَدَىٰكُمۡ لِلۡإِيمَٰنِ إِن كُنتُمۡ صَٰدِقِينَ
(Los beduinos) creen que te han hecho un favor abrazando el Islam. Diles: “No crean que me han hecho un favor convirtiéndose al Islam. Es Al-lah Quien les ha hecho un favor al guiarlos hacia la fe, si son sinceros (cuando dicen que creen)”.
وَٱلَّذِينَ ءَامَنُواْ وَٱتَّبَعَتۡهُمۡ ذُرِّيَّتُهُم بِإِيمَٰنٍ أَلۡحَقۡنَا بِهِمۡ ذُرِّيَّتَهُمۡ وَمَآ أَلَتۡنَٰهُم مِّنۡ عَمَلِهِم مِّن شَيۡءٖۚ كُلُّ ٱمۡرِيِٕۭ بِمَا كَسَبَ رَهِينٞ
Y haremos que los hijos de los creyentes que siguieron a sus padres en la fe (sin llegar a alcanzar su mismo nivel) se reúnan con ellos (en el Paraíso, elevando la posición de los hijos a la de sus progenitores), sin que la recompensa de las acciones de estos se vea mermada, pues toda persona es responsable de sus propias acciones[1].
1- Ver la nota de la aleya 13 de la sura 17.
لَّا تَجِدُ قَوۡمٗا يُؤۡمِنُونَ بِٱللَّهِ وَٱلۡيَوۡمِ ٱلۡأٓخِرِ يُوَآدُّونَ مَنۡ حَآدَّ ٱللَّهَ وَرَسُولَهُۥ وَلَوۡ كَانُوٓاْ ءَابَآءَهُمۡ أَوۡ أَبۡنَآءَهُمۡ أَوۡ إِخۡوَٰنَهُمۡ أَوۡ عَشِيرَتَهُمۡۚ أُوْلَـٰٓئِكَ كَتَبَ فِي قُلُوبِهِمُ ٱلۡإِيمَٰنَ وَأَيَّدَهُم بِرُوحٖ مِّنۡهُۖ وَيُدۡخِلُهُمۡ جَنَّـٰتٖ تَجۡرِي مِن تَحۡتِهَا ٱلۡأَنۡهَٰرُ خَٰلِدِينَ فِيهَاۚ رَضِيَ ٱللَّهُ عَنۡهُمۡ وَرَضُواْ عَنۡهُۚ أُوْلَـٰٓئِكَ حِزۡبُ ٱللَّهِۚ أَلَآ إِنَّ حِزۡبَ ٱللَّهِ هُمُ ٱلۡمُفۡلِحُونَ
No encontrarás a gente que (verdaderamente) crea en Al-lah y en el Último Día que quieran a quienes se oponen a Al-lah y a Su Mensajero, aunque sean sus propios padres, sus hijos, sus hermanos o sus parientes. (Al-lah) ha depositado la fe en los corazones (de dichos creyentes) y los ha fortalecido con Su luz. Y los hará entrar en jardines por los cuales corren ríos, donde vivirán eternamente. Al-lah está complacido con ellos y ellos están complacidos con Él. Esos son los verdaderos partidarios (y defensores de la religión) de Al-lah. Realmente, los verdaderos partidarios de Al-lah serán los triunfadores.
وَٱلَّذِينَ تَبَوَّءُو ٱلدَّارَ وَٱلۡإِيمَٰنَ مِن قَبۡلِهِمۡ يُحِبُّونَ مَنۡ هَاجَرَ إِلَيۡهِمۡ وَلَا يَجِدُونَ فِي صُدُورِهِمۡ حَاجَةٗ مِّمَّآ أُوتُواْ وَيُؤۡثِرُونَ عَلَىٰٓ أَنفُسِهِمۡ وَلَوۡ كَانَ بِهِمۡ خَصَاصَةٞۚ وَمَن يُوقَ شُحَّ نَفۡسِهِۦ فَأُوْلَـٰٓئِكَ هُمُ ٱلۡمُفۡلِحُونَ
Y quienes habitaban la ciudad (de Medina) y aceptaron la fe antes de que llegaran a ellos (quienes emigraron de La Meca) aman sinceramente a estos últimos y no sienten resentimiento ni envidia en sus corazones por la parte (del botín) que han recibido quienes emigraron. Les dan preferencia en todo, aunque ellos mismos padezcan necesidad[1]. Y a quienes Al-lah libre de la avaricia y del egoísmo, esos serán los auténticos triunfadores.
1- Los habitantes de Medina (conocidos como los ansar) que acogieron a los emigrantes de La Meca los ayudaron concediéndoles parte de sus bienes y propiedades, y establecieron con ellos unos lazos especiales de hermandad que incluso les permitían heredar entre ellos, antes de que fuera revelada la aleya que limitaba el derecho a heredar solamente a los parientes de sangre más cercanos (ver la nota de la aleya 33 de la sura 4). Algunos llegaban a darles lo único que tenían para comer, anteponiendo las necesidades de los emigrantes de La Meca a las de sus propios hijos.
وَٱلَّذِينَ جَآءُو مِنۢ بَعۡدِهِمۡ يَقُولُونَ رَبَّنَا ٱغۡفِرۡ لَنَا وَلِإِخۡوَٰنِنَا ٱلَّذِينَ سَبَقُونَا بِٱلۡإِيمَٰنِ وَلَا تَجۡعَلۡ فِي قُلُوبِنَا غِلّٗا لِّلَّذِينَ ءَامَنُواْ رَبَّنَآ إِنَّكَ رَءُوفٞ رَّحِيمٌ
Y las generaciones que los sucedieron (en la fe) invocan a Al-lah diciendo: “¡Señor!, perdónanos, así como a nuestros hermanos que creyeron antes que nosotros. No infundas en nuestros corazones rencor hacia los creyentes, ¡oh, Señor! Ciertamente, Tú eres Compasivo y Misericordioso”.